Erbil – Guía Completa

Erbil – Guía Completa

La capital del Kurdistán es considerada por algunos historiadores la ciudad permanentemente habitada más antigua del mundo, con más 4000 años de historia, sus orígenes se estiman en el siglo XXIII a.C.

• Población: 900.000 habitantes.
• Capital del Kurdistán iraquí.
• País: Iraq.
• Superficie: 115 km2.

La ciudad de Erbil es la cuarta más grande de todo Iraq, y la de mayores dimensiones de la zona kurda. Una región que parece aislada de todos los conflictos que está sufriendo el país a día de hoy.

Esto nos lleva al siguiente escenario: la seguridad, y es que te sorprendería saber cuan segura es, y es que no ha sufrido ningún atentado terrorista desde el 2014, lo cual si lo comparamos con los estándares occidentales, Erbil tienen un índice similar al de cualquier gran ciudad de Europa.

Todo esto, no hace que debamos ir a Iraq sin extremar las precauciones, pero si ayuda a aliviar los temores previos. Además, para que conozcas desde un principio qué te vas a encontrar en esta región del Kurdistán, te invito a seguir leyendo la guía más completa que podrás encontrar en todo internet sobre Erbil, una ciudad llena de historia.

1. Un poco de historia.

La capital kurda, como ya mencionábamos antes, es uno de los asentamientos, permanentemente habitados, más antiguos de la humanidad. Erbil formaría parte de un gran número de imperios y es que sería invadida por un gran número de ellos: asirios, medos, babilonios, macedonios, persas u otomanos, son solo unos pocos de los que invadirían la región.

Edad antigua.

El origen de Erbil se estima sobre el siglo XXIII a.C. gracias a yacimientos históricos que muestran que la región ya estaba poblada por aquel entonces. Sin embargo, poco se conoce de sus dos primeros siglos de historia.

En el siglo XXI a.C. Erbil aparece por primera vez en los textos cuneiformes haciendo referencia al templo de Ishtar, diosa de la fertilidad, siendo este uno de los lugares de culto más importantes de todo el imperio asirio.

Asimismo, no sería hasta el siglo VII a.C. cuando haría su aparición el imperio medo, el cual se cree es el origen del pueblo kurdo. Este nuevo reino haría una alianza con Babilonia para atacar Asiria y apoderarse de la ciudad.

Un siglo más tarde, en el siglo VI a.C., la ciudad sería conquistada por Ciro II, para dos siglos más tardes ser conquistada una vez más por otro gran personaje de la historia, Alejandro Magno.

La ciudad sería invadida una y otra vez por distintos reinos, creando un marco bastante inestable, pero en el que la población asiria y kurda siempre serían mayoría.

La expansión del islam.

En el siglo VII, la mayor parte de los kurdos abrazaría la religión del profeta Mahoma, aportando unos años de estabilidad a la ciudad bajo el califato Rashidun y posteriormente el califato de los omeya.

Esta sería la religión principal de los distintos califatos y principados, hasta que en el siglo XIII los mongoles harían su aparición bajo el famoso Gengis Kan. Sin embargo, tras la fragmentación de su imperio, la ciudad de Érbil pasaría a formar parte del imperio timurida.

Este imperio sería fundado por Tamerlán, el último gran conquistador de Asia Central, pero que, a diferencia de estos, también se acogería el islam.

Siglos más tardes dos antiguos conocidos volverían a ocupar la región: los imperios persa y otomano, quedando Erbil del lado otomano.

Los famosos siglos XXs.

En la primera mitad del siglo XX, los kurdos lucharían del lado otomano, perdiendo la guerra y como resultado, la oportunidad de tener un país propio. Esto ha hecho que la segunda mitad del siglo XX y el siglo XXI, los kurdos hayan estado en una lucha constante por su independencia, siendo en algunos momentos una lucha armada.

La invasión de Iraq en 2003, concluiría con el reconocimiento en 2005, de Erbil como la capital de la región autónoma del Kurdistán iraquí, hecho que quedaría recogido en la constitución del país.

El momento más álgido del movimiento nacionalista kurdo en la región fue en 2017 cuando tras un referéndum, no reconocido por la mayoría de naciones, que buscaba la autodeterminación, daba como resultado un 93% del sí a favor de la independencia.

A día de hoy, Erbil sigue formando parte de Iraq, al igual que el resto del Kurdistán iraquí, pero solo el futuro dirá, si algún día terminan alcanzando esa ansiada independencia.

2. ¿Merece la pena visitar Erbil?

Sí, sí y un millón de veces sí. Si no tienes mucho tiempo, creo que con esa respuesta ha sido más que suficiente, pero si quieres saber el porqué aquí va.

Al llegar a Erbil, la ciudad con la que nos encontramos, poco tiene que ver con esas zonas que vemos en las noticias. Si vienes buscando encontrarte un país en ruinas, este no va a ser el caso. Sin embargo, esta sí que es una oportunidad única para conocer a los kurdos.

El Kurdistán iraquí, es la región kurda de mayor autonomía de todo el Kurdistán. ¿Esto qué significa? Bueno, pues que podremos conocer muy bien su cultura sin las represiones de sus países vecinos.

Una cultura muy desconocida por muchos occidentales, y que apenas ocupan unas frases en el noticiero cuando se habla de la lucha contra el Estado Islámico, a pesar de que su papel ha sido fundamental en esta lucha.

Una ciudad, región y cultura que merece mucho la pena descubrir y que está al alcance de la mano, a muy pocos kilómetros de Europa.

3. ¿Es seguro?

Al inicio de este post, comentaba que el último atentado que sufrió la región kurda de Iraq fue en 2014. A esto hay que añadir que el último extranjero asesinado fue en 2003. Suceso cuanto menos sorprendente cuando descubrimos que los extranjeros del Kurdistán no son solo militares y personal de embajadas, sino también profesores, banqueros, personal de la industria petrolera, investigadores o periodistas, entre muchos otros.

Esto también hará que nos rasquemos la cabeza al ver como la ciudad en muchos casos se nos recuerda mucho más a occidente que a oriente.

Situación actual.

Pero volamos al asunto primordial, ¿es seguro? ¿Qué sucede con el Estado Islámico? Bueno, el Estado Islámico llegó a estar a tan solo 15 minutos de Erbil, a punto de adentrarse en el Kurdistán iraquí. Suceso que nunca llegó a acontecer.

Esto se debe, en parte, a que tras la invasión de Iraq en 2003, los kurdos decidieron apoyar al gobierno estadounidense para derrocar al dictador Sadam Husein. Como resultado, en 2005 se firmaba una nueva constitución en la que se reconocía al Kurdistán como un estado autónomo dentro de Iraq, cuya capital sería Erbil.

Entre las distintas concesiones, una de ellas fue la de tener su propio ejército, que ha sido clave en la lucha contra el Estado Islámico. Esto hace, que cuando viajemos de una ciudad a otra, pasemos por un sinfín de controles militares, donde nos pedirán la documentación y se asegurarán de que todo siga en orden.

Además los kurdos son moderados religiosos, por lo que el mensaje del ISIS no caló en la población, y la lucha contra Sadam se vio como el derrocamiento de un tirano, más que como una invasión

A día de hoy, la situación en el Kurdistán iraquí es estable, pero es fundamental que nos informemos antes de visitar la zona de la situación actual y de las vías que tenemos que tomar para acceder al país. Un ejemplo de esto, fue mi llegada al país, que tuvo que ser en avión y no en autobús puesto que el recorrido habría sido a través de la frontera turco siria que en ese momento se encontraba en conflicto.

4. ¿Capital del Kurdistán?

El Kurdistán es una región que se sitúa a lo largo de 6 países encontrándose sus mayores terrenos en 4 países: Turquía, Siria, Iraq e Irán.  Como habréis podido imaginas, seleccionar una capital de todo el Kurdistán sería bastante complicado, porque pese a haber un sentimiento de unión entre las distintas regiones kurdas, todas tienen una cierta identidad propia.

Cuando visitaba la región de Diyarbakir, todos acordaban que si un día todo el Kurdistán alcanzaba la independencia, ellos debían ser la capital del estado. ¿Qué creéis que me dijeron cuando me encontraba en Erbil? Sí, así es, la capital de todo el Kurdistán debería ser Erbil, por su larga historia e importancia geográfica.

Fuera como fuese, solo podemos afirmar una cosa a día de hoy, y es que Erbil es la capital del Kurdistán iraquí. Hablamos de una ciudad repleta de historia, que quien sabe si algún día será la capital de todo el Kurdistán.

5. Visado.

Un gran número de países pueden obtener un visado gratuito a la llegada al Kurdistán iraquí, que será solo válido para la región del Kurdistán. Si quisiéramos visitar la zona árabe, tendríamos que solicitar un visado a través de la embajada iraquí.

Los países de la Unión Europea, además de Estados Unidos, Reino Unido, Canadá, Australia, Nueva Zelanda, Japón y Corea del Sur tendrán acceso a este visado on-arrival. Un trámite muy sencillo, en el que muy rara vez se forman colas. Lo máximo que puede suceder es que el policía extrañado os pregunte el motivo de vuestra visita, puesto que hay poco turismo, pero no debería pasar de ahí.

Otros países que también pueden tener acceso a este visado on-arival son: Brasil, Argentina o Mexico. De la misma forma, viene bien informarse en la embajada antes de realizar el viaje, ya que los países nombrados en este párrafo solo aparecen como candidatos a las visas on-arrival en algunas de las páginas oficiales.

El resto de países deberán de ponerse en contacto con la embajada iraquí en su país para solicitar el visado por la vía habitual.

6. Cuándo visitar Erbil.

La ciudad de Erbil posee un clima continental con unos inviernos bastantes fríos,  que pueden llegar a dar lugar a nevadas, y unos veranos calurosos que en algunas ocasiones podrán superar los 40 grados. De la misma forma, no estaremos viajando a regiones como los Emiratos Árabes o Arabia Saudita, por lo que se puede visitar a lo largo de todo el año.

Cabe tener en cuenta que al inicio de la primavera se celebra el nuevo año kurdo, una fiesta nacional que hace subir los precios de los hoteles y hace mucho más difícil encontrar un anfitrión a través de Couchsurfing.

7. Cómo llegar a Erbil.

A Erbil podemos acceder de tres formas. La más sencilla sería a través de avión, teniendo la opción de llegar en taxi o minibús desde las otras dos grandes ciudades: Duhok o Suleimaniya. Por último también tenemos la posibilidad de llegar en autobús desde Turquía, adentrándonos hasta Erbil, en lugar de detenernos en Duhok. A continuación os lo explico todo de una forma más detallada.

Llegar en avión.

La forma más habitual de llegar a Erbil es desde Ankara, Turquía, o Ammán, Jordania. También existen vuelos directos desde Diyarbakir.

Dependerá de nuestras conexiones a la hora de escoger la más barata, pero no nos debería resultar difícil encontrar vuelos (solo ida), por menos de 250 euros. Siempre cabe la posibilidad de unirlo a un viaje a Turquía o Jordania, desde donde podremos comprar vuelos mucho más económicos.

En el aeropuerto podremos comprar una tarjeta SIM para nuestro móvil y sacar dinero desde cualquier cajero.

¿Cómo llegar al centro?

En el avión no creo que vaya mucha gente, por lo que si le preguntáis a algún local sobre cómo llegar al centro, tal vez tengáis suerte y alguien decida alcanzaros, si no, aquí tenéis la mejor forma:

Llegar desde Duhok o Suleimaniya.

Muchos son los minibuses y taxis que hacen este recorrido, por lo que si vais a la estación principal de la ciudad, no tendréis ningún problema a la hora de encontrar un vehículo que os lleve. Normalmente esperan a estar llenos para salir, por lo que yo me acercaría temprano en la mañana, para no perderlo.

Llegar al Kurdistán iraquí desde Irán.

Si queremos venir a Erbil, lo más normal es que crucemos a través de la frontera de Tamarchin. Aunque no fue mi ruta, esta se plantea una buena opción, ya que podréis visitar Rawandiz, una famosa región del Kurdistán.

También existe la posibilidad de cruzar a través de la frontera de Bashmaqabe, pero lo más habitual es que os detengáis en Suleimaniya. En google maps puede resultar extraño, ya que ambas ciudades no parecen estar muy alejadas. Sin embargo, los vehículos deberán tomar rutas mucho más largas, para ir por carreteras seguras.

Llegar en autobús desde Turquía.

Si nos encontramos viajando por el Kurdistán turco, cabe la posibilidad de tomar un autobús que nos lleve desde Diyarbakir hasta Erbil. Esta misma línea de autobuses nos darán la opción de detenernos en Duhok, pero dependerá de nuestro itinerario y tiempo en el país que decidamos seguir de largo o detenernos en la ciudad cercana con la frontera kurda.

El autobús que parte desde Diyarbakir bordea la frontera con Siria, hasta adentrarse en Iraq, por lo que recomiendo revisar la situación en la que se encuentre la frontera, tanto iraquí como siria.

8. Cuántos días pasar en Erbil.

La capital kurda merece que la visitemos un mínimo de dos días. En un día podríamos ver la mayoría, pero no tendríamos tiempo de disfrutarla.

Por lo tanto, dedicaría un mínimo de dos días, siendo tres días la opción ideal, para visitar sus monumentos, probar su gastronomía y tomarnos unas cervezas en el barrio cristiano.

9. Dónde hospedarte en Erbil.

Couchsurfing.

Iraq no es un destino que atraiga mucho turismo, o al menos a lo largo de las últimas décadas, por razones obvias. Esto hace que la oferta hotelera sea bastante pequeña y por tanto los precios sean elevados.

En todo el país apenas existen unos o dos hostales y estos se encuentran en Suleimaniya. Así que a la hora de visitar la capital kurda tendremos dos opciones. Por un lado, adaptar nuestro presupuesto a unos mayores gastos y quedarnos en un hotel. Por otro lado, Couchsurfing, y es que funciona bastante bien en Erbil, por lo que no deberíais tener problema a la hora de encontrar un anfitrión. Eso sí, hacedlo entre una y dos semanas antes, para que no os veáis apurados después.

Hoteles.

Si aun así, preferís la opción de hotel, o estáis cansados de haberos quedado tantas veces en casas de locales a través de Couchsurfing y queréis unas noches de tranquilidad y sosiego. Aquí os dejo los mejores hoteles de Érbil.

Hoteles económicos.

Janet Bludan Hotel. De las distintas opciones que podemos reservar online (algunos hostales de la ciudad no se encuentran en internet) este hotel es el más económico, a cambio de una calidad decente.

Hoteles precio medio.  

Fareeq Hotel. Por un precio razonable (para ser el Kurdistán)  Fareeq nos ofrece un muy buen servicio con un personal acogedor. Además, se encuentra en Ankawa, por lo que su ubicación es perfecta.

Hoteles de lujo.

Bella Room Hotel. Si buscamos un mayor lujo esta es sin lugar a dudas la opción de mejor relación calidad precio.

Grand Palace Erbil. Un hotel muy lujoso, muy bien ubicado y un personal muy hospitalario.

Fiori Hotel. Si queremos disfrutar de toda clase de lujos en nuestro viaje a Erbil, en el barrio cristiano de Ankawa tenemos este magnífico hotel con un gran bar/restaurante y unas hermosas vistas de la ciudad. Todo un lujo.

10. Qué ver en Erbil.

Ciudadela de Erbil.

Sus más de 7000 años de historia han convertido a la ciudadela de Erbil en Patrimonio de la humanidad, según la UNESCO.

En la actualidad se encuentra en restauración y es una empresa española la que lleva el proyecto. Las obras parecen no terminar nunca, pero es que se trata de un proceso de restauración de más de 300 edificaciones.

A pesar de los andamios, todavía merece la pena una visita. A todo esto, se le unen uno de los mejores puntos para observar la ciudad, puesto que la ciudadela se sitúa sobre una pequeña colina de 30 metros de alturas dándonos unas hermosas vistas de la plaza principal y el casco antiguo.

Museo textil kurdo.

Dentro de la ciudadela nos encontraremos con varios museos, siendo el más importante el textil kurdo. A pesar de que no suene apasionante, es una bonita forma de conocer una parte de su cultura, a través la decoración de interiores a la hora del uso de alfombras o de sus vestimentas.

Una industria que si bien es cierto siempre formó parte de la cultura kurda, hoy en día se encuentra en declive.

Plaza principal.

El lugar más concurrido de todo Erbil, se llena de kurdos al atardecer, momento en el que sus fuentes comienzan a funcionar, pareciendo  ayudar a rebajar la temperatura. Es uno de los lugares más populares de todo Erbil para tomarnos un té.

Pese a ser un lugar muy turístico, no se suelen ver extranjeros, por lo que podréis sentiros como uno más.

La Torre del Reloj.

Una de las construcciones más icónicas de la ciudad, se encuentra en uno de los extremos de la plaza principal. La Torre del Reloj es uno de esos símbolos que todo kurdo reconocerá. Me lo llegaron a comparar con el Big Ben, pero veo la comparativa un tanto exagerada.

Machko Tea Café.

Esta casa del té es famosa por atraer académicos, filósofos, políticos y artistas. Con más de 80 años de historia, Machko se ha convertido en uno de los lugares icónicos de Erbil.

Una gran oportunidad para conocer locales o simplemente disfrutar de un té por menos de 50 céntimos de euro.

Bazar.

Junto a la plaza, podemos ver una serie de callejuelas que se adentran y nos muestran el típico bazar de todo país musulmán. Aquí nos podremos comprar un bonito recuerdo de nuestra visita a la capital kurda.

Barrio árabe y la mezquita Pasha.

Hoy en día se encuentra prácticamente abandonado, y es que la guerra creó una herida entre kurdos y árabes que todavía no ha terminado de sanar. Aun así, creo que es de visita obligatoria pasear por este barrio.

Al final del día, terminamos visitando la mezquita Pasha en este barrio, donde los hombres que se encontraban allí, nos invitaron a pasar, a tomar té y nos contaron la historia de esta mezquita. A través de Couchsurfing pude contactar con un local que se ofreció a enseñarme la ciudad, gracias a esto pude entender todo lo que nos explicaban, ya que no hablaban inglés.

Parque Minarete y el minarete de Mudhafaria.

A una distancia que se puede hacer a pie, lo cual haría para ver cómo es la ciudad más allá del casco antiguo, se encuentra el parque Minarete que adquiere su nombre por dar cobijo a la antigua construcción.

Un parque lleno de jardines por los que pasear con un gran número de fuentes y lugares en los que detenernos a descansar.

A todo esto, hay que añadir una joya que se esconde en una de las esquinas del parque, lo único que queda de la mezquita más antigua que una vez tuvo Erbil. El minarete de Mudhafaria, con 36 metros de altura, fue construido entre los siglos XII y XIII, durante el reinado del famoso Saladino.

Parque Shanidar.

Un parque tranquilo de visita NO obligatoria, pero que si tenemos algo de tiempo podríamos visitar. Posee un teleférico, que no estaba en funcionamiento cuando visité el parque, pero dispone de grandes jardines en los que los kurdos suelen hacer picnics o disfrutar de la tarde.

Durante nuestro paseo, llegamos a recibir más de una invitación para unirnos a esos picnics, pero por falta de tiempo no pudimos, tal vez vosotros tengáis más suerte.

Parque Sahmi Abdulrahman.

Construido en 1998, llegaría a ser la base militar del 5º cuerpo del ejército de Sadam Hussein. Cambiaría su nombre en 2004 en honor al viceprimer ministro del gobierno del Kurdistán, el cual fue asesinado en un atentado terrorista.

Dentro del parque podemos encontrar dos lagos, además de grandes explanadas llenas de vegetación por las que pasear o hacer, una vez más, un picnic. Al igual que Shanidar, no es de visita obligatoria.

Ankawa.

“Aquí es donde guardamos a nuestros cristianos” me decía entre risas un amigo kurdo (entiéndase la broma). Y es que aunque nos pueda sorprender, en la capital kurda de Erbil, se encuentra el barrio cristiano de Ankawa. Un gran número de iglesias, se ven acompañadas por muy buenos restaurantes y sobre todo bares.

Este barrio es muy famoso por su oferta hotelera y fiestas nocturnas.

Teacher Club.

Sin lugar a dudas el mejor bar de Ankawa. Un buen ambiente, tanto al exterior, como al interior, en el que podremos cenar o tomar algo. Además tenía la mejor relación calidad precio de toda la ciudad. Por lo que antes de detenerme a recomendaros bares o restaurantes, incluiría este en mi itinerario de forma obligatoria.

Itinerario.

11. Dónde comer en Erbil.

Damasquino. Una de las mejores opciones de comida árabe en Ankawa. Además es bastante económico.

Almandi Restaurant. “El mejor restaurante de la historia de los restaurantes, con la mejor comida de la historia de la comida”. Así me lo definió un amigo kurdo y si bien es cierto que esta definición es un tanto exagerada, en este restaurante de Akaba, los mandis, un plato de arroz y carne tradicional de península arábica, son increíbles.

Kebab Yasin. En el centro de Erbil este pequeño restaurante, es muy popular entre los locales. Una opción barata y buena para probar el kebab local acompañado de un buen yogurt.

Tamdar Restaurant. Una ambientación kurda unida a comida tradicional. Todo por un precio razonable.

Samad Restaurant. Una buena opción si queremos probar comida tradicional iraquí. Raciones abundantes y buen precio.

Aland Steackhouse. Aunque es algo carete, se trata de una muy buena opción si queremos comer carne fresca y de calidad.

Taj Restaurant. Un restaurante libanés con un buen menú y precios razonables.

12. Mejores bares de Erbil.

Teacher Club. Como os dije con anterioridad, se trata del mejor bar de todo Erbil. Poco más que añadir.

German Restaurant and Bar. Un poco más caro que el anterior, este restaurante alemán tiene una buena carta de cervezas, además de algunos platos occidentales, si venís con hambre.

T Sport Bar. Una opción perfecta si queréis ver algún evento deportivo o un ambiente más de pub cerrado.

13. Dónde fumar Shisha.

Dream City Shisha. Un ambiente moderno, tranquilo, rodeado de libros y del placer de una buena Shisha. Mi favorito, sin lugar a dudas.

Shalyar. Un buen café donde tomarnos un té y fumar una buena shisha. Todo por un precio muy económico.

14. Mapa.

15. Conclusión.

Más de 7000 años de historia, la étnia más grande de oriente sin un país propio, todo rodeado por una cultura increíble donde el papel de la mujer dista mucho del que tenemos en mente.

Una oportunidad para conocer la historia de Iraq y sobretodo, del Kurdistán. Aprender que no todo Iraq es como nos lo muestran en las noticias, ni todo el país son árabes.

Mi experiencia en Iraq no pudo ser más gratificantes, conocí a grandes personas en todas y cada una de las ciudades que me hospedé, y puedo decir que a día de hoy todavía mantengo el contacto con algunas de ellas.